El afilador. La confrontación que Porfirio Muñoz Ledo sostiene con el diputado federal Mario Delgado y el canciller Marcelo Ebrard, ya comenzó a sacar chispas. Pero no se trata de amenazas o mensajes velados, el conflicto tiende a crecer y a proyectarse a nuevos niveles.
Viejo lobo de mar, Porfirio Alejandro afila sables para las batallas que se presenten en el futuro inmediato, por lo pronto ya hizo públicas su diferencias con el legislador y con su jefe el secretario de Relaciones Exteriores. Incluso advirtió que si llega al liderazgo de Morena (lo que se ve muy remoto por sus amenazas), expulsará a esa mancuerna. No me castigues.
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Sonaja y tambor. Cuitláhuac García, (des) gobernador del estado de Veracruz busca nadar de a muertito en el rendición de cuentas que no le cuadran. Atenido a su cercanía con el presidente López Obrador, hace que la virgen le habla cuando se le pide que aclare el gasto del presupuesto.
Para evadir transparentar el gasto público y el manejo de los dineros pertenecientes al erario, el ingeniero se presenta como ignorante de las operaciones financieras, pero tarde o temprano tendrá que enfrentar la realidad. Vuela mariposa.
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Lágrimas de sangre. Los deudos de los mineros de Pasta de Conchos ya recibieron la promesa de que serán rescatados los cuerpos que aún se encuentran sepultados. Incluso se habla de indemnizaciones y un monumento. Cuestión de esperar. Pero está complicada la tarea por la cantidad de tierra que los cubre.
Que no se cumpla lo prometido dificultará la candidatura del senador Armando Santa Guadiana Tijerina, que ya sueña con ser el próximo gobernador coahuilense. Aparte de su actividad política, es empresario de minas carboníferas, quien lo sepa que le pregunte a Manuel Bartlett Díaz. Canto por no llorar.
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Cumbia de los monjes. Conocedor del Evangelio y de las teorías espirituales, Javier Sicilia es implacable en sus juicios armados con un vocablo impecable. La razón le asiste por haber dado muestras de confianzas en las promesas que le fueron hechas para resolver la muerte de su hijo.
La paciencia se agotó y siente que se han rebasado los límites de la tolerancia. Desde ahora se vislumbra que el poeta pueda enarbolar sus banderas para iniciar un movimiento en el estado de Morelos que será más incómodo que una piedra en el zapato. Perdóname.
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Que se mueran de envidia. José Manuel Míreles Valverde es médico, activista y autor del libro Todos somos autodefensas. Actualmente se desempeña como Subdelegado Médico del ISSSTE en el Estado de Michoacán, pero además ya figura como fuerte precandidato a la gubernatura.
Con el estandarte de la Virgen de Guadalupe que le fue entregado por Manuel Espino, arranca una vertiginosa carrera para dejar en el camino al senador Cristobal Arias. Mireles ya tomó la delantera y también deja atrás a Raúl Morón, quien tiene el respaldo del magisterio de aquella entidad.
La lucha por suceder al perredista Silvano Aureoles comienza ponerse al rojo vivo. Difícil que el Partido de la Revolución Democrática (PRD) pueda conservar la única plaza estatal que tiene a nivel gobernador. Conjuro de amor.
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Pedacito de mi vida. Hija de Carlos Sansores Pérez, viejo político campechano que fue presidente del PRI cuando éste era una verdadera aplanadora, Layda Sansores no tiene pudor para tirarse al piso y buscar ser la sucesora de Alejandro Moreno (en Campeche, no como dirigente del Revolucionario Institucional), al grado de tirarse al piso de manera grotesca.
A la Jefa Delegacional en Álvaro Obregón le valió sorbete hacer el ridículo mayúsculo, con tal de ganar simpatías de quien es la única persona que la puede bendecir. La colegiala.
