Opinión

Nos están robando la tranquilidad

En los hechos en un sinfín de poblados a lo largo del país ya no existe tranquilidad todo lo contrario. Desde luego me refiero a la seguridad; nos enteramos día a día de los múltiples delitos que se cometen de todo tipo y que van aumentando, aunque en cifras oficiales se habla de disminución, ello es cuestionable.  

Si bien es cierto en la CDMX se siente un poco más de seguridad, lo cierto es que los delitos mencionados también la impactan, a pesar de que contamos con el mayor número de policías como en ninguna otra entidad y que aquí es la sede de la Secretarías de la Defensa Nacional, Marina, De Seguridad Pública Federal y la Fiscalía General de la República.

Al frente de la Secretaría de Seguridad Ciudadana en la CDMX se encuentra un elemento que debido a su actuar ya sufrió un atentado brutal  del cuál providencialmente se salvó, me refiero a Omar García Harfuchs, hijo de Javier García Paniagua quien dirigió la ya desaparecida Dirección Federal de Seguridad y quien también ocupó el puesto que hoy ocupa su hijo.

Se entiende entonces que en esa familia están acostumbrados a combatir el delito y no les tiembla la mano para ello.

Pero a pesar de lo anterior y al combate frontal a la delincuencia que realiza la Secretaría de Seguridad Ciudadana, se siguen registrando delitos los cuales lastiman y dañan a la ciudadanía.

Narro el caso de una familia cercana a la cuál a tres de sus miembros en zonas diferentes de la Ciudad les robaron accesorios a sus automóviles en un período de 10 días por un monto superior a los $80.000 y de lo cual no hay registros en las cifras oficiales ya que ninguno presentó denuncia, al preguntarles el motivo respondieron (los tres son abogados) nada se logra, solo se pierde el tiempo.

El nivel de impunidad es superior al 95% lo que es una invitación a delinquir.

Pero vayamos al interior de la república en dónde la delincuencia organizada se ha apoderado de poblaciones completas y ha desplazado a sus habitantes.

Hablemos del estado de Zacatecas, ahí la violencia se ha convertido en lo cotidiano por lo innumerables delitos que se cometen, por tal motivo  se cataloga al municipio de Fresnillo como uno de los más peligrosos de los 2471 que constituyen el país. Recordemos que a menos de cumplir 4 meses de la administración del actual Gobernador David Monreal (12 de Septiembre 2021) aparecieron 10 cuerpos dentro de una camioneta frente al Palacio de Gobierno, entendiéndose como un mensaje y un desafío a las nuevas autoridades.

En un caso reciente de la población del Mirador en el Municipio de Valparaiso, tuvieron que desplazarse por tercera vez de sus hogares por enfrentamientos entre dos grupos de la delincuencia organizada.

En Michoacán la violencia no es diferente está incontenible en los municipios de: Uruapan, Zamora, Apatzingán, Jacona y Lázaro Cárdenas y hasta en la capital Morelia, se ha llegado al caso de que ese estado productor del manjar que es el aguacate y cuya exportación a los estados unidos permite el ingreso de cantidades importantes de divisas, está ya siendo controlado se dice por grupos de la delincuencia organizada al igual que el limón, la venta del pollo en diversos estados.

El pasado 20 de junio se dio el informe de las cifras actualizadas sobre los delitos que se cometieron en el mes de mayo  destacando a los cinco estados  más peligrosos por el número de homicidios doloso y éstos son los resultados: Guanajuato 231, Baja California 211, Estado de México 206, Michoacán 168, Chihuahua 154.

El estado de Colima, en una nota del 4 de mayo el periódico el economista en una gráfica reporta que el primer trimestre del presente año se han registrado 217 homicidios dolosos, en contraste los ocurridos en 2015 que fueron 37 y aunque fueron creciendo a partir de entonces el máximo se había dado durante el mismo período en 2020 con 196, aunque el año pasado se registró una baja a 156.

En Guerrero el año pasado terminó con 1357 homicidios dolosos, eso sí 77 menos que en el 2020.

A ello debemos de agregar los fraudes que se realizan por el robo de identidad y en las tarjetas de crédito.

Los robos de automóviles que día a día ocurren en el todo el territorio nacional y que el año pasado  por la pandemia registro una disminución del 5% con relación al 2019 llegó a los 141 967 de los cuales poco más del 56.2 % no estaba asegurado.

La desaparición de personas y no nos referimos a quienes por algún motivo decidieron abandonar su hogar, si no a mujeres y hombres principalmente jóvenes ocurre todos los días.

La extorsión en la modalidad cobro de piso está extendida en todo el país en las empresas y negocios no importando su tamaño ni el giro, lo mismo ocurre con los profesionistas independientes.    

Y la lista de delitos sigue, sigue y sigue por lo que decimos nos están robando la tranquilidad  aunque  a millones ya se la robaron.

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