Escupir al cielo
Toda la farsa estuvo rodeada de un ambiente celestial.
Elementos conjugados para alcanzar el paraíso y sentirse en el Edén, cobijados por el Mesías.
Rodeados de querubines, ángeles y demonios, el contexto fue paradisíaco y digno de ser un marcado contraste con el infierno de Dante, el escritor no el oportunista.
Hasta la sede (Puebla de Los Ángeles), para evitar la presencia de quienes radican en el averno.
La escenografía perfecta para escupir al cielo.
Demostrar al mundo que la filosofía de la Cuarta Transformación incluye superar a los Cachorros de la Revolución, para dar paso los engendros de Lucifer.
Como si fueran los más castos y leales seguidores de Leviatán, había que esmerarse en hacer de la mentira una profecía que se impregne en la memoria de los incautos.
Aquellos que fueron adoradores del Satanás de la política, ahora conversos y purificados por demagogia infernal para dejar testimonio fiel de que el azufre será su perfume preferido.
Ni la lira de Nerón, ni un arpa divina. Los mismísimos Ángeles Azules (desde Iztapalapa para el mundo), con interpretaciones que se convierten en mensaje directo para los infelices.
Nunca es suficiente, Las maravillas de la vida, Cómo te voy a olvidar, Mi confesión…
Temas que son el entorno de la farsa.
Demagogia convertida en pontificado para que se entienda que los deseos malignos son para presumirse y divulgarse en exclusivas publicaciones que no son, para nada, el antónimo de La Prensa fifí.
Restregar en el rostro de los ángeles caídos, que ahora predomina el reinado maléfico y demoniaco de quienes se asumen como Príncipes del Mal.
La perversidad como moneda de cambio y dejar constancia real, de que el poder enriquece y no iguala con la pobreza.
Hacerles ver a los ingenuos que los ropajes (sin referencia al smoking y los encajes de seda) de humildad, solamente sirven para conseguir los endemoniados objetivos que cabalgan en los corceles de la bajeza.
Infamia llevada con maestría al pináculo de la falsedad.
Y, por supuesto, las viandas de la exquisitez para hacerle saber a los harapientos y los muertos de hambre que la ficción incluye la comedia y Juntos Haremos Historia.
Inevitablemente viene a la mente la sentencia que ayer era digna de un decálogo:
El pueblo no es tonto. Tonto es el que piensa que el pueblo es tonto.
Claro está que la humildad es un slogan y, también, cabe el lavado de manos para espiarse de las culpas:
“Cada quien es responsable de sus actos”.
Los nombres de los personajes y de los actores, salen sobrando. Cualquiera sabe que no es ficción, sino la auténtica realidad de una falacia hecha ofensa por los embusteros para hacerle saber a los desarrapados que sigan creyendo en ellos.
No es patraña ni calumnia, testimonios públicos sobran. Vergüenza y dignidad están ausentes.
Pero en fin, brindemos con champagne porque la sidra de Huejotzingo, es una ofensa para la corte embustera
Que conste, la frivolidad puede ser patentada por los farsantes.
La lucha de clases comienza a darle la razón a los vencedores, falta la visión de los caídos.
CERRADURAS Y CANDADOS
En la cruenta lucha por los espacios, un pilar y cimiento del viejo PRI, Porfirio Alejandro Muñoz Ledo y Lazo de la Vega, le demostró a Mario Delgado cómo se ejerce el poder. Le dio una clase de que los Fouches de caricatura no pueden confrontarse con los Maquiavelos de carne y hueso. La prosapia y el derecho de sangre, nuevamente la realeza por delante, triunfó frente el arribismo y la tarea de improvisar. La arena fue la Cámara de Diputados…Ya comenzó el martirio para Graco Ramírez Garrido Abreú, apenas se va y sobran elementos para radicarlo y someterlo a juicio. Y falta que le saquen brillo a todo lo opaco de Rodrigo Gayosso, su hijastro y operador de negocios turbios…Esperemos que Paco Ignacio Taibo II retome sus orígenes de sangre y no quiera hacer del Fondo de Cultura Económica un tianguis de barriada…Explota la violencia en los estados de Chihuahua y Guanajuato, no hay soluciones ni posicionamiento que convenza a la sociedad. Tampoco aparecen pronunciamientos de los críticos eternos. Algo pasa, sin duda, que enmudecen…Moisés Mansur, veracruzano y socio de Karime Macías, se pondrá de moda en breve. Expropiaciones y juicio de por medio lo harán noticia de primeras planas. Seguro ya anda en el trámite de un amparo.