¿Ahora sí lo tomaremos en serio? más nos vale, para ello las naciones (gobiernos, empresas y población) tienen que tomar conciencia de ello.
Pero ahí es donde empiezan los problemas y los motivos son multifactoriales, pero nos involucran a todos.
La Conferencia sobre el Cambio Climático que se llevó a cabo en la Ciudad Escocesa de Glasgow celebrada del 9 al 12 de noviembre resultó tan importante que António Guterres, Secretario General de las Naciones Unidas, expreso lo que está en juego es importantísimo, si no se actúa con determinación, nos estamos jugando nuestra última oportunidad literalmente de cambiar el rumbo de las cosas.
No es una llamarada de petate como coloquialmente diríamos en México, la situación más que seria es extremadamente grave y estamos tan sólo a grado y medio de variar el clima y de vivir las terribles consecuencias de nuestra inconciencia. Lo hemos padecido ya en los últimos años, terribles inundaciones y sequias y unas y otras alteran la vida de millones de personas y provocan la pérdida de vidas.
Vivimos en un mundo extraordinario que no hemos sabido cuidar.
Y desde luego tiene sobrada razón, el problema es que todos lo entendamos y hagamos a un lado los intereses económicos de cualquier tipo.
Todo nos lleva a entender que el gran desarrollo industrial se está convirtiendo en la destrucción del mundo que conocieron nuestros antepasados, muchos de los avances de la ciencia que nos facilitan la vida son altamente contaminantes en su conjunto y dañan severamente el medio ambiente, un ejemplo claro son los vehículos automotor y aunque ya existen híbridos y eléctricos su alto costo y la falta de autonomía en la carga ya que ésta sólo dura horas aún no satisfacen los requerimientos.
Se expuso que para el año 2030 sólo se van a fabricar automóviles eléctricos y esperemos que para entonces se haya avanzado en la tecnología para que la carga sea de mucho mayor duración y el costo se logre disminuir sensiblemente.
Y si las grandes industrias de algunos sectores industriales son corresponsales del cambio climático, la realidad es que pareciera que nadie nos escapamos de contribuir a la incesante contaminación.
La industria refresquera con millones de envases de plástico de un solo uso, han logrado contaminar todo el mundo, los mares, ríos, arroyos, montañas, parques, calles, no hay lugar que escape.
Y es precisamente el plástico que se utiliza para facilitarnos la vida, ahora se ha vuelto en contra de la misma, aunque en nuestro país y otros se han prohibido las bolsas de ese material, millones de ellas aún se siguen utilizando y ya sabemos que se tardan en degradar 55 años y las botellas 500.
Y sólo una muestra, el año pasado en Houston decenas de palmeras murieron por las heladas y se pararon actividades por el poco gas disponible debido a ello se dispararon los precios incluyendo el de la electricidad.
Las aseguradoras se estima tuvieron que pagar más de 10 mil millones de dólares sólo en ese estado de la unión americana, como consecuencia de un clima que hemos modificado.
La utilización de combustibles fósiles como el carbón, el gas natural y el petróleo crudo son elementos que colaboran fuertemente en la contaminación, por lo que deben de ser sustituidos ya por energías limpias.
Veremos si con la aportación de 100 mil millones dólares que harán los países más ricos se logra detener el incremento de la temperatura, que traerá como consecuencia desplazamiento de millones de personas, desempleo, pobreza y hambruna ¿quién desea eso? hagamos todos algo antes que el destino fatal nos alcance, deseamos no verlo.
Las Naciones Unidas en un programa para el medio ambiente tiene por objeto disminuir las emisiones de metano el cuál es un poderoso gas de efecto invernadero y se centraran en el sector de los combustibles fósiles y continuaran con el sector agrícola y los residuos.
Tarea titánica y con poco respaldo, ello debe modificarse no puede posponerse, nos va la vida de por medio. ¿Si lo entendemos?
