Jubilados luchan por democratizar el sindicato ferrocarrilero
Juan José Calixto asegura que tienen que erradicar el cacicazgo de Víctor Flores
Como en la década de los 50, los trabajadores del sindicato ferrocarrilero están dando de nuevo la batalla para democratizar al sindicato.
Juan José Calixto, presiente de la agrupación de Jubilados Ferrocarrileros y miembro de la Gran Comisión Ferrocarrilera es un heredero de ese movimiento.
Y ahora lucha, como lo hicieron en su momento Demetrio Vallejo y Valentín Campa, por mejores condiciones laborales para los empleados y la democratización al momento de elegir a sus líderes.
“Estuvimos toda la vida en esta lucha, nosotros participamos en el movimiento nacional ferrocarrilero de Demetrio Vallejo. Actualmente el conflicto es por el cacicazgo de Víctor Flores y sus cobros de cuotas sindicales”, señala.
Calixto recuerda la lucha que llegó hasta los tribunales para evitar que el sindicato les descontara 1% de su pensión como cuota sindical.
Al final, el Sexto Tribunal Colegiado determinó que el descuento era indebido, se tenía que cancelar, y resarcir el daño.
Si bien se eliminó este estatuto, Víctor Flores no ha regresado los 700 millones de pesos que se descontaron a los jubilados por años.
“El actual Gobierno federal se comprometió a resarcir el daño de la época neoliberal, nosotros somos afectados por el neoliberalismo. Nos dice que los sindicatos tienen autonomía, pero nosotros creemos que esa autonomía no es para robar ni para la impunidad.
“Actualmente nuestro caso está congelado, estamos en pláticas con Gobernación pero esas pláticas son solo para decir que nos atienden”, denuncia.
El movimiento que encabeza Calixto también demanda el uso de los 10 centros deportivos que tiene el sindicato.
De acuerdo con un contrato firmado entre el sindicato ferrocarrilero y Kansas City Southern de México, estos espacios son para los jubilados y sus familias.
Pero esto no ocurre en la realidad. El contrato colectivo especifica que los jubilados tienen derecho a usar estos espacios.
“Se hizo un convenio para que el sindicato los administrara pero que el uso y los frutos de esos Centros Deportivos, que generan entre tres y cuatro millones de pesos mensuales, fueran para nosotros.
“Desde 1997 Víctor Flores no ha rendido cuentas al respecto. Nos dicen que ese es un problema de Víctor, pero esa es propiedad federal. Las autoridades están siendo omisas y le deben de exigir a Víctor Flores que regrese todo. Esa es nuestra lucha y así seguiremos”, concluye.
Con información de Reporte Índigo