Retiro por desempleo, ayuda hoy, golpea mañana
Retiros por desempleo en las Afores reducirán hasta el 10 por ciento el monto de pensiones
Desde que inició la pandemia por Covid19 en el país, las solicitudes de retiro por desempleo en las Afores han ido en aumento y si bien ayudan a paliar la falta de ingresos en los hogares, es solo una solución temporal con serias implicaciones para el momento en que el trabajador se quiera jubilar.
La que más debería preocupar a los trabajadores es la pérdida de semanas de cotización ante el Instituto Mexicano de Seguro Social lo que alargará la fecha de retiro.
Hasta el momento se exigen 1250 semanas de cotización, lo que representa alrededor de 25 años de trabajo; sin embargo, una reciente propuesta del presidente Andrés Manuel López Obrador busca que se reduzcan a 750 que equivaldrían aproximadamente 15 años.
En cualquiera de los dos casos, el retiro por desempleo significa una reducción inmediata de alrededor de 52 semanas, poco más de un año de trabajo.
El siguiente punto a evaluar es el saldo de la cuenta de retiro, que de por sí es golpeado constantemente por el cobro de comisiones y las no tan atractivas inversiones que realizan las Afores con éste, al retirar recursos como apoyo ante el desempleo se reduce y al momento de calcular el monto de la pensión la cantidad que recibe el trabajador es menor hasta en un 10 por ciento, a la que hubiera recibido de no tocar su ahorro.
Carlos Montoya, asesor especializado en Afores, indicó que las instituciones, a través de sus asesores, tienen como instrucción persuadir al trabajador para que no realice el trámite explicándole que al retirar dinero se eliminan semanas cotizadas, lo que alarga la fecha de retiro.
“Los agentes hacen su trabajo al tratar de evitar que el trabajador retire el dinero, pero del otro lado de la mesa está una persona recién despedida, angustiada por su situación económica y el retiro es la única alternativa sin importar las consecuencias, por más que se las expliquen”, dijo en entrevista para RS Sindical.
Los trabajadores tienen la opción de recuperar las semanas perdidas con el retiro por desempleo mediante aportaciones voluntarias, pero “prácticamente no ocurre nunca, la gente prefiere alargar su jubilación o recibir menos, en lugar de reintegrar los recursos a su cuenta”, señaló.
La Comisión Nacional del Sistema de Ahorro para el Retiro (Consar), informó que de enero a agosto de 2020 los retiros por desempleo alcanzan una cifra de 12 mil 495 millones de pesos, lo que representa un aumento del 66 por ciento comparado con el mismo periodo del año pasado.
Las instituciones de administración de fondos para el retiro con la mayor cantidad de trámites de este tipo han sido Coppel, con un crecimiento de más del 60 por ciento, seguido de XXI Banorte con un aumento del 58 por ciento y PensionISSSTE cuyo incremento fue alto respecto al mismo periodo del año anterior, aunque en términos monetarios no rebasa los 20 millones de pesos
Montoya dijo que esta tendencia se explica debido a que el gobierno aplicó las medidas de austeridad en plena pandemia y significó la pérdida de empleos en el propio gobierno.
Por su parte, el presidente de la Asociación Mexicana de Afores (Amafore), Bernardo González, dijo que al ser un derecho contemplado en la Ley las Instituciones de Administración de Fondos para el Retiro tienen la obligación de facilitarlo a quien lo requiera, pese a que impacte en su contra.
Indicó que la estimación inicial era de 1 millón 500 mil solicitudes de retiros por desempleo a causa de la pandemia, pero al cierre de agosto la cifra llevan 1 millón 200 mil peticiones, con un repunte especial en el mes que concluyó.
“En agosto se tuvo un incremento relevante porque la ley estipula que deben pasar 45 días de desempleo (oficial, lo que significa que el patrón ya reportó la baja ante el IMSS), y aunque muchas personas perdieron el trabajo en los meses pasados, apenas cumplieron el plazo estipulado”, refirió.
González estimó que lo ocurrido sea el pico más alto y la tendencia vaya en descenso, pues coincide a la vez con la reactivación de las actividades productivas en la mayor parte del país con lo que suponen ya no será necesario para muchas personas.
Los retiros por desempleo no solo son un problema para el ahorro de los trabajadores al momento de su retiro, hoy en día están impactando en la liquidez de las Afores, por lo que se prevé que continúen tratando de persuadir a los trabajadores de concretar el trámite.
Desempleados necesitan dinero
Quienes han perdido su empleo como resultado de la pandemia por el Covid19 han tenido que recurrir a todo para generar ingresos en casa, en especial aquellos que son el sostén económico de una familia.
En redes sociales las ventas informales incrementaron tanto en círculos cercanos como en población abierta y pese a la restricción para la movilidad en la calle, al menos en las primeras semanas de la pandemia, tuvieron que exponer su salud con tal de entregar pedidos o hacer servicios a domicilio y así generar ingresos temporales.
Conforme a los datos de la encuesta del Gabinete de Comunicación Estratégica dados a conocer en su portal web, en el mes de marzo cuando se declaró la contingencia sanitaria en México 66 por ciento de los participantes reveló que la pandemia afectó la economía familiar, cifra que se elevó al 71.1 por ciento en abril y mantuvo un alza constante hasta este mes.
De los afectados, el 85 por ciento coincidió en que la falta de ingresos se debió al desempleo, reducción de sueldos o ventas, así como el aumento en el precio de productos de la canasta básica y otros que se convirtieron en esenciales como de sanitización, entre otros.
Carlos Montoya expuso que para los mexicanos que han padecido este tipo de carencias instantáneas en términos de ingreso los retiros de los fondos de ahorro tampoco han sido la solución.
“Hay que esperar mes y medio, los 45 días de ley, como desempleado, después el trámite y al final les entregan montos que se esfuman ante los compromisos económicos acumulados”, dijo y la ganancia real al obtener el dinero ahorrado por adelantado, resulta una pérdida casi irreparable a futuro.
Gobierno busca controlar Afores
Con la utilidad de las Afores puesta en tela de juicio tras evidenciar que en situaciones de emergencia en poco ayudan a los trabajadores afectados, surgieron una serie de iniciativas en el Congreso que buscan darle al gobierno el poder y administración del ahorro de los trabajadores.
La más reciente fue de autoría del Partido del Trabajo que busca que el gobierno tome el control de la administración del ahorro de los trabajadores mexicanos, lo que representaría un riesgo que de no contener a tiempo, afectará seriamente los recursos de los trabajadores en su retiro.
Mediante el llamado Fondo Solidario de Reparto el dinero ahorrado a través del IMSS y el ISSSTE por los trabajadores se quedaría en dichos institutos para aplicarse de manera exclusiva y cubrir con ello las pensiones de los trabajadores y sus beneficiarios, señala el documento publicado el pasado 22 de septiembre en la Gaceta Parlamentaria de la Cámara de Diputados.
Al respecto, Bernardo González, de Amafore, consideró inviable la propuesta presentada y aseguró que la competencia permite a los trabajadores elegir libremente qué empresa prefiere que administre sus recursos, propicia la reducción de comisiones en condiciones de mercado y fomenta alcanzar mejores rendimientos.
“En las mesas de trabajo se ha concluido reiteradamente la inviabilidad del sistema de Afore única y los beneficios que para el trabajador representa una sana competencia que conduce a un sistema de administración profesional de sus recursos en términos de rendimientos para incrementar su patrimonio”, indicó el organismo.
Otro legislador que durante la pandemia presentó una iniciativa relacionada con las Afores fue Mario Delgado, del partido Morena, quien propuso eliminar el plazo de 45 días posteriores al despido o baja laboral, para que el trabajador pueda acceder a los recursos de su cuenta de ahorro, permitiéndole que sea inmediato y así proteger la economía familiar que es la que recibe el mayor impacto ante este tipo de situaciones; además de no descontarle las semanas de cotización que se aplican como penalización, además del retiro en efectivo de los recursos.
Conforme a la legislación actual, la penalización por el retiro de fondos de ahorro, aunque sea por desempleo, tiene como objetivo desincentivar su realización y motivar al trabajador a encontrar un nuevo puesto a la brevedad, sin embargo, en el contexto de la pandemia el escenario se modificó y aunque el trabajador quisiera, las ofertas de empleo se detuvieron en muchos sectores. Hasta el momento, la propuesta no ha avanzado.
Uno más, también de Morena, Edelmiro Santiago Santos presentó una iniciativa de reforma a la Ley de los Sistemas de Ahorro para el Retiro (SAR) para que fuera el Banco del Bienestar quien administre los recursos que hasta el momento gestionan las Afores por decisión del trabajador. Tampoco prosperó la ocurrencia del legislador de la cual se desmarcó de inmediato a bancada y el partido, aludiendo que fue presentada a título personal.
Se prevé que en el periodo ordinario de sesiones del Congreso de la Unión se aborde la iniciativa enviada por el presidente López Obrador que contempla la reducción de las semanas de cotización, entre otros supuestos beneficios para el trabajador y el patrón, dado que está respaldada por las principales cúpulas empresariales del país.
Ahorro voluntario en duda
Para elevar el monto de ahorro para el retiro, que a su vez se traduce en una mejor pensión durante la vejez, tanto la Consar como las Afores recomiendan el llamado “ahorro voluntario”, sin embargo, en medio de la crisis por el coronavirus, a la población afectada con la pérdida de sus empleos no están en condiciones de ahorrar para el futuro, incluso tampoco quienes continúan trabajando, prefieren tener disponible lo más que puedan para atender cualquier emergencia de salud, consideró Carlos Montoya.
“Desafortunadamente el esquema de ahorro voluntario es ya una visión romántica del futuro, en el que al ser viejitos con eso alcanzará para vivir plenamente. La realidad es que uno de los sectores más afectados en la pandemia fue el de la tercera edad y de poco les han servido sus pensiones y ahorro para salir adelante, los trámites han sido engorrosos y con muchos obstáculos es lógico que el ahorro voluntario de momento no sea opción para nadie. Eso debe cambiar”, señaló.
Explicó que la gente está optando por ahorrar pero de manera directa con instrumentos bancarios que ofrecen bajo rendimiento pero que están menos expuestos al ir y venir de las inversiones.
Según la Consar, un ahorro voluntario bien programado puede elevar el monto para el retiro en la vejez, por lo que recientemente dio a conocer que amplió los puntos de pago donde la gente puede hacer sus depósitos que consisten en: domiciliación de cargo recurrente a una tarjeta de débito, en tiendas de conveniencia como 7-Eleven, Círculo K, Extra, Telecomm, Banco del Bienestar, La Red de la Gente, Walmart, Sam´s club, Superama, Bodega Aurrera, Chedraui, Farmacias del Ahorro, Yastás y Punto Recarga a nivel nacional, a partir de 50 pesos y con la periodicidad que desee el trabajador; en sucursales de las afores, directamente en la empresa con descuentos vía nómina, en internet, por teléfono y mediante una aplicación de teléfonos celulares.
“Las opciones para que depositen recursos de manera voluntaria a su ahorro son muchísimas, se podría decir que en cada esquina hay una opción, pero de momento no es prioridad para la población ahorrar a través de esos instrumentos”, insistió Montoya.
Así se puede tramitar
Requisitos para retiro por desempleo de una cuenta de AFORE
- 45 días desempleado (el patrón no siempre reporta en tiempo real las bajas, lo que puede retrasar el trámite)
- No haber realizar un retiro similar en los últimos 5 años
- Expediente de identificación actualizado el cual exige reconocimiento de voz, de huellas y facial
- 3 años registrado en una afore
- 2 años registrados en el IMSS
- Identificación oficial
- CURP
- Número de Seguridad Social
- Estado de cuenta bancaria y CLABE
- Solicitud de disposición de recursos por retiro parcial