La UAM y su sindicato escalaron su negociación, luego de que la universidad afirmara que no tiene recursos para otorgar los incrementos que pide la organización gremial.
La Universidad Autónoma Metropolitana (UAM) puso como fecha el 27 de enero para presentar su propuesta final a los trabajadores, mientras que el Sindicato Independiente de Trabajadores de la UAM (SITUAM) amagó con organizar un paro si no se cumplen sus exigencias. Sin embargo, el lunes el sindicato votó a favor de postergar el paro.
“El paro tenía el objetivo de invitar a la institución a atender los temas del emplazamiento por la revisión contractual y salarial. Los trabajadores han decidido no continuar con el paro de labores pero sí con las actividades que se tienen programadas para estos días”, explicó Jorge Dorantes, secretario general del SITUAM.
Dorantes también informó que esta semana seguirá la mesa de negociación donde los trabajadores esperan que puedan reorganizar un segundo emplazamiento a Huelga, por lo que consideran son violaciones a su contrato.
El secretario general de la UAM, José Antonio de los Reyes, dijo en una entrevista con El Universal, que la universidad no tiene los recursos suficientes para subsanar el 20 por ciento de aumento salarial que piden los trabajadores ni para llevar a un incremento de 70 por ciento a otras prestaciones, como los apoyos para festividades.
“La decisión la tendrá que tomar el sindicato y deberá ser apegada a la ley laboral. El sindicato tiene el derecho de estallar una huelga, que tan bien vista sea por la comunidad ese es otro asunto”, dijo el funcionario.
De los reyes dijo que alumnos y profesores serán los principales afectados si estalla la huelga, pues ya han sufrido efectos negativos anteriormente por cambios en el calendario escolar.
Los trabajadores piden un incremento de más de un millón 176 mil pesos anuales para fomento cultural y deportivo, así como para festejos de día del niño, de las madres, entre otros.
Este aumento junto con el salarial son los que sostiene De los Reyes que no pueden costear y que, incluso, de ser otorgados ponen en riesgo el funcionamiento de la institución.
Hasta el momento hay dos emplazamientos a huelga a partir del 1 de febrero.
Además del incremento, los trabajadores también exigen que la universidad deje de contratar a trabajadores por honorarios para labores que puede hacer el personal sindicalizado o de base y que se regularicen plazas abiertas.
