La iniciativa aprobada por el Senado de la República que adiciona los artículos 88 Bis 1 y 88 Bis 2 a la Ley General de Salud con el objetivo de integrar la figura del residente médico, así como sus derechos mínimos esenciales, continúa su proceso legislativo en la Cámara de Diputados.
El dictamen fue aprobado de manera unánime el 30 de abril en el Pleno del Senado de la República y se envió a la Cámara de Diputados para su análisis y dictaminación, para que puede ser presentado ante el pleno y ser votado.
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El Senado estableció en la ley el concepto de médico residente como aquel profesional “que ingresa a una Unidad Médica o Instalación Receptora de Residentes para cursar una especialidad médica a tiempo completo”.
Como sus derechos incluyó recibir remuneraciones y prestaciones estipuladas por la institución de salud, conforme a lo establecido en la normatividad vigente.
También obtener asesoría y defensa jurídica en aquellos casos de demanda o queja de terceros por acciones relacionadas en el desempeño de las actividades correspondientes al curso de la residencia médica que realiza.
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La minuta en análisis en el recinto de San Lázaro señala que esos especialistas son parte importante del Sistema Nacional de Salud de México y que la mayoría de ellos labora en hospitales otorgando atención directa a pacientes.
Cerca de 10 por ciento de ellos desempeña actividades de educación médica, investigación, salud pública y administración.
De acuerdo con el Sistema Nacional de Residencias Médicas, en 2017 había 30 mil 481 médicos residentes de los que 46 por ciento realizó su residencia en el Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS) y 35 por ciento en instituciones de la Secretaría de Salud (SSA).
En tanto, en el Instituto de Seguridad y Servicios Sociales de los Trabajadores del Estado (ISSSTE) se concentró siete por ciento.
En el documento se menciona que el Senado reconoce que persiste el desafío de incorporar todas las variables posibles que impactan en la oferta y demanda de los trabajadores de la salud, a efecto de establecer un adecuado equilibrio que implique una mejora significativa en los servicios que ofrecen.
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La reforma establece condiciones mínimas indispensables para la salvaguarda de esos profesionistas, a los que se les confía el futuro de la salud de la población.
La iniciativa de reforma a la Ley General de Salud surge en respuesta a las demandas planteadas por médicos residentes del sector salud y en apoyo a la formación de especialistas. Se presentó y fue avalada por el Pleno en el Segundo Periodo Ordinario de Sesiones del Primer Año de la LXIV Legislatura.
