La lista de raya es una modalidad para contratar a personal no calificado o mano de obra directa. Generalmente son contratos de corta duración o temporales. A la hora de emplear esta modalidad es importante aplicarlo en las actividades o situaciones con los que no se cuenta con personal calificado y debe de notarse que las solicitudes que se reciban no pueden ser sustituidas por un contratado por nómina.
Si se quiere realizar una contratación de estas características en la Dirección General de Administración del Personal se realiza la aprobación y las anotaciones necesarias para la misma.
Entre los documentos a aportar el empleador debe mostrar la justificación que indique la necesidad de contratar personal adicional del que suele formar parte del organigrama, es necesario adjuntar un presupuesto con el monto anual que se pretende gastar en este tipo de contrataciones.
La Caja de Previsión Para Trabajadores a Lista de Raya del Gobierno de la Ciudad de México (CAPTRALIR), es un Organismo Público Descentralizado que tiene por objeto proporcionar a los trabajadores a Lista de Raya en activo, a los pensionados, jubilados y a sus familiares derechohabientes, así como a empleados del propio Organismo, las prestaciones y servicios establecidos en su reglamento y marco normativo.
Uno de sus principales objetivos es el de administrar de manera eficiente los recursos financieros derivados de las aportaciones hechas por una parte por el Gobierno de la Ciudad de México, y por otra parte por los propios trabajadores a Lista de Raya, así como de empleados de la propia Dependencia.
Los Trabajadores a la Lista de Raya del entonces Departamento del Distrito Federal, carecían de un esquema de seguridad social integral que le ofreciera prestaciones económicas y sociales, dichos trabajadores no habían sido contemplados en la Ley de Pensiones Civiles de 1947, ni en la posterior Ley del Instituto de Seguridad y Servicios Sociales de los Trabajadores del Estado de 1959.
El entonces Regente de la Ciudad, licenciado Ernesto P. Uruchurtu, expidió el 18 de noviembre de 1961, el reglamento que creó la Caja de Previsión para Trabajadores a Lista de Raya, mismo que se publicó en la Gaceta Oficial del Departamento del Distrito Federal el 30 de noviembre del mismo año.
El 2 de enero de 1962 la CAPTRALIR inició formalmente sus operaciones, ofreciendo en un principio a sus cerca de 10,000 derechohabientes un esquema de previsión social que comprendía básicamente el otorgamiento de pensiones y préstamos a corto plazo.
El 25 de abril de 1968 se decretaron nuevas adiciones al Reglamento, destacando el incremento en el monto de las pensiones.Se consignaron también los gastos funerarios equivalente al importe de 60 días en la percepción que tuvieran estos al morir.
En agosto de 1972, se suscribió un convenio con el ISSSTE que formalizó la prestación del servicio médico con lo que se avanzó en materia de seguridad social.
En octubre de 1979, da inicio a su programa de Vivienda.
El 28 de noviembre de 1982 se expidió un nuevo Reglamento, en el que se incorporan beneficios adicionales en materia de Seguridad Social.
En 1984, se otorgan los primeros préstamos escolares.
El 15 de noviembre de 1988, se aprobó el Reglamento de Prestaciones de la Caja de Previsión para los Trabajadores a Lista de Raya del Departamento el Distrito Federal.
El 1º de abril de 1993, la CAPTRALIR adquiere la responsabilidad de atender el pago de pensionados y otras prestaciones económicas a los jubilados del extinto Organismo Industrial de Abastos (I.D.A).
Las disposiciones principales del Organismo son: el Reglamento de Prestaciones, el Estatuto Orgánico, el Reglamento Interno y el Manual Administrativo.
Los Ingresos que constituyen el patrimonio del Organismo están conformados por los siguientes conceptos:
Cuotas que se descuentan a los Trabajadores a Lista de Raya.
Aportaciones que provienen del G.D.F.
Ingresos por intereses de inversiones en valores e intereses de préstamos y créditos hipotecarios así como beneficios y productos diversos.
En noviembre de 2021 la CAPTRLIR cumplirá 60 años desde su creación, de los 10 mil trabajadores que en ese tiempo conformaron este organismo, ahora son más de 50 mil que requieren un nuevo órgano ejecutivo, con rendición de cuentas, con prontitud y resolutivos en materia de pensiones y jubilaciones, prestaciones de servicios médicos eficientes y de calidad, en tanto que las prestaciones económicas, como son préstamos personales e hipotecarios, deben apegarse a la realidad económica de las necesidades de los tiempos actuales. En fin crear una nueva estructura de Seguridad Social Integral para los trabajadores del Gobierno de la Ciudad de México.