Para 2026, se espera que el uso de Cobots se extienda en diferentes industrias de la fabricación y su existencia crezca hasta 42 por ciento, estima el presidente regional para América Latina de Universal Robots, Denis Pineda.
Se trata de máquinas dedicadas a las tareas rudimentarias de la fabricación, lo que permite que los empleados experimentados puedan dedicarse a labores que requieren mayor concentración y habilidades. Además, pueden trabajar en conjunto con los empleados humanos, pues se trata de un trabajo en conjunto.
“Debido al riesgo de daño físico, las empresas generalmente necesitan mantener a los robots separados de sus empleados o limitar su funcionalidad. Si bien es un estándar de seguridad para los trabajadores, esto reduce el potencial y la aplicabilidad de los robots”, dice Pineda.
Los cobots o robots colaborativos, puntualiza, llenan este vacío, toda vez que en cualquier tipo de industria, estos manejan tareas rudimentarias para que los empleados puedan concentrarse más en aspectos que requieren mayores habilidades, como la resolución de problemas o la estrategia creativa.
Para el directivo de la desarrolladora de robots industriales pequeños, fáciles de usar, los cobots se construyen intencionalmente para interactuar con las personas, porque no están diseñados para reemplazar a los trabajadores, sino para mejorar la eficacia de muchas tareas. “La automatización completa de las industrias no es el objetivo, ya que las empresas necesitan el toque humano para la flexibilidad de campo y los ajustes sobre la marcha”.
En materia de productividad, estudios del Instituto Tecnológico de Massachusetts (MIT) indican que los equipos colaborativos humanos-cobots tienen un 85 por ciento menos de tiempo de inactividad durante la jornada laboral. Pero los cobots no reemplazan la actividad humana, la modifican. Los cobots asumen las tareas aburridas, mundanas y repetitivas, lo que permite a los trabajadores humanos desempeñar funciones cognitivas, estratégicas y creativas.
Los estudios respaldan que estos roles más desafiantes, y la capacitación, el avance y las oportunidades que surgen, conducen a una mayor satisfacción laboral. Los empleados felices son el mejor activo de una empresa, directamente relacionado con el desempeño organizacional, junto con una mejor productividad, calidad y retención de los trabajadores.
Un mito común de la automatización es que los cobots destruirán puestos de trabajo, pero esta es una afirmación infundada. La adopción de nuevas tecnologías también atrae a trabajadores más jóvenes, creando más empleos y sustentando el crecimiento y desarrollo de las industrias.
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