De acuerdo con la Confederación Patronal de la República Mexicana (Coparmex) de Puebla, si el sindicato de trabajadores de Volkswagen México no acepta el incremento salarial ofrecido del 11% corren el riesgo de perderlo.
Según la cúpula empresarial, no aceptarlo podría generar que el ofrecimiento sea retirado por parte de la armadora y que se pierda la oportunidad de un incremento de tal magnitud, luego de varios años de aumentos de un dígito.
“Hay grupos ajenos (al sindicato) que pretenden desestabilizar no sólo a la armadora alemana, sino a la industria automotriz en general, que incluye al sector de autopartes”, afirmó el presidente local de la organización empresarial, Rubén Furlong.
Furlong confió en que las autoridades locales ayuden a mediar la negociación y que no se afecte la operación de la industria automotriz del estado de Puebla, por el riesgo de una huelga.
“Una huelga no hace bien a las dos partes, sobre todo cuando la empresa aceptó peticiones altas de la representación sindical, la cual debe llamar a los trabajadores de base a que sean participativos en la consulta sobre el acuerdo salarial”, sostuvo.
Incluso, Furlong se aventuró a decir que las autoridades locales vigilen que estos presuntos grupos externos no desestabilicen al sindicato al convencer a los agremiados a que no acepten el incremento.
El ofrecimiento de la empresa, de origen alemán, es de 9 por ciento de aumento directo al salario, y otro 2 por ciento de incremento en prestaciones para sus trabajadores sindicalizados.
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