Entretenimiento

El futbol y el pájaro

EL CUENTO

Entre los siglos XIX y XX vivió Maurice Maeterlinck, quien escribió una obra de teatro intitulada “El Pájaro Azul”, un cuento que también cautivó al séptimo arte y fue llevado cinco veces a la pantalla, dos ocasiones en la era del cine mudo. En 1976 el director George Cukor, célebre por su notable trabajo con las actrices, dirigió la más reciente versión, con tres grandes de la actuación: Elizabeth Taylor, Jane Fonda y Ava Gardner, en una coproducción estadounidense-soviética, difícil de realizar por la Guerra Fría que se desenvolvía en esos entonces entre ambas potencias y que incluía en el reparto a Margareta Terechnova y a Nadezna Pavlova, para conjuntar artistas de ambos países.

En la trama, Tyltyl y Myltylt son dos niños que viven en una casa con su madre (Elizabeth Taylor) y su padre y se van a la cama sin cenar por atravesar el puente. En la noche, el pequeño y la niñita ven fuegos artificiales y van a una fiesta donde sólo hay niños ricos  y se regresan tristes pues ellos son pobres. Al llegar, una anciana se les aparece y se transforma en una bella hada llamada “La Luz” (la misma Elizabeth Taylor),  quien les pide encontrar al pájaro azul para aliviar a una enfermita, por lo que les da vida al gato, al perro, al pan, a la leche, al fuego y al agua y juntos parten a buscar al ave. Ellos llegan con sus abuelitos que han muerto ya y los reciben  bien, pero el pájaro no está ahí, tampoco con “La Noche” (Jane Fonda) quien guarda los peores males de la humanidad, no lo encuentran en el bosque, ni en el gran salón de la lujuria presidido por una dama (Ava Gardner), llegan a donde habitan los niños que están por nacer y tampoco está ahí. Regresan a su casa y al levantarse, ven más bello todo y ahí se encontraba el pájaro azul en una jaula, se lo llevan a la enfermita pero se escapa, sin embargo, todos son muy felices. En resumen, el pájaro azul estaba en su propio hogar y ellos lo buscaban afuera.

Y EL FUTBOL

Este antiguo cuento podría aplicarse perfectamente a las dos escuadras más famosas del futbol mexicano: América y Guadalajara en el pasado torneo Clausura 2022. Las Águilas tuvieron un torneo desastroso, donde visitaron incluso durante dos fechas las profundidades de la tabla de posiciones y eso hizo que el 2 de marzo dieran de baja al técnico argentino Santiago Solari. Llegó entonces como interino Fernando Ortíz, también argentino que había jugado para los de Coapa y al que tenían en la dirección técnica de la Sub 20. Sin que nadie lo esperara, le cambió la imagen al equipo y obtuvo 6 triunfos en fila: 3-0 al Toluca, 1-0 al Necaxa, 3-0 a Juárez, 3-1 a Xolos, 2-0 a León, 2-0 a Tigres y todavía sacó un empate a cero frente a Cruz Azul, para colocar al América en cuarto lugar general y pasarlo directamente a la Liguilla, después de haber estado en el fondo del pozo. Para su desgracia, en la Liguilla sucumbió ante el Pachuca.

La otra escuadra, el Guadalajara, había tenido una terrible campaña bajo el mando de Marcelo Michel Leaño, quien fue cesado el 14 de abril y trajeron a Ricardo Cadena, que dirigía al Tapatío en la Liga de Expansión, con no buenos resultados, pues lo tenía colocado en séptima posición, empero, al tomar a las Chivas, se apuntaron cuatro triunfos seguidos: 1-0 al Cruz Azul, 2-1 a Xolos, 3-1 a UNAM y 1-0 al Necaxa, para colocar al Rebaño en zona de reclasificación, donde hicieron a un lado a los Pumas, para llegar a cuartos de final y ser eliminado por el Atlas, que a la postre, sería el campeón.

EL PÁJARO AZUL

Entonces, el ave del cuento de Maeterlinck estaba en casa, en las jaulas de Coapa y Verde Valle, respectivamente. América se había ido a buscar a Europa un míster que dirigió al mismísimo Real Madrid y el Guadalajara había pasado por entrenadores connotados como José Saturnino Cardozo, Tomás Boy, Luis Fernando Tena y Víctor Manuel Vucetich, cuando ambas escuadras tenían en su propia casa a dos estrategas que únicamente esperaban la oportunidad para revelarse como finos técnicos dispuestos a sacar adelante al equipo de sus amores, con el que fueron futbolistas y ahora, en esta nueva etapa de sus vidas, pueden dirigir con éxito y colorín colorado, este relato se ha acabado.

OTRO CUENTO

Porque otra historia que no quisiéramos imaginar, sería la de un grupo de jugadores que aunque tenían el potencial, talento y habilidades, tendieron la cama a sus respectivos entrenadores hasta que cayeron para demostrar, cuando se los cambiaron, lo que poseían deportivamente. Pero eso no, nunca. ¿Verdad? Sería un cuento de horror.

Dios mediante ¿Le parece que nos encontremos aquí la próxima quincena?

 

Etiquetas
Ver más

Notas Relacionadas

Deja un comentario

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *

Back to top button
Close