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Corre el run rún

Por favor no se lo vaya a contar a nadie. Es un secreto que se pretende mantener en el edificio de Vallarta donde despacha Carlos Humberto Aceves y del Olmo (así dice su acta de nacimiento), quien en su calidad de dirigente de la CTM estalló en cólera al saber que se perdió el Contrato Colectivo de Trabajo de General Motors de Silao, Guanajuato.

Esos mismos indiscretos que trasmitieron los hechos en donde la furia y el mal humor tuvieron lugar en primera fila, dicen que los rayos y centellas en contra de Tereso Medina fueron estremecedores.

Medina Ramírez, quien además es dirigente de la Federación cetemista en el estado de Coahuila, tendrá que recurrir a la política del avestruz y no sacar la cabeza mientras dura la ira.

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No vaya usted a creer todo lo que se dice, lector, pero tampoco ponga en tela de duda que la exquisitez de Javier Corral Jurado, todavía gobernador del estado de Chihuahua, está punto de desaparecer por cambiar su indumentaria para ajustarse al catálogo de la vestimenta que rige a la 4T.

Para salvar el pellejo y no correr el riesgo de ser un huésped VIP de un reclusorio, brincará del Partido Acción Nacional a las filas que dice comandar Mario Delgado. Cuestión de supervivencia y efectos del cobro de facturas pendientes.

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Corre el rún rún de que en las farmacias de la ciudad de Campeche y en Champotón se agotaron las pastillas tranquilizantes. Misteriosamente y a raíz de que el Tribunal Federal Electoral dictaminó una revisión de TODAS las boletas de la pasada elección del 3 de junio, vino la crisis nerviosa colectiva.

No vaya usted a pensar que Layda Sansores está entre los afectados. No, ella si acaso está en riesgo de perder la gubernatura que ya festejaba ruidosamente pero no hay problema mayor.

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Tambores de alarma se dejan escuchar en la cueva de la familia González Torres-Martínez donde han recibido la notificación de una multa millonaria por haber cometido graves delitos electorales.

Pero no se crea que los propietarios de la franquicia del Partido Verde han perdido el sueño. Están acostumbrados a sortear hábilmente esos tropiezos.

Por cierto que en esa familia de están de plácemes por la boda en puerta que está ligada con un hijo de Pedro Ojeda Paullada, de apellido Ojeda Cárdenas, sobrino de la artista Elsa Cárdenas.

Entre la felicidad del enlace matrimonial y la angustia de la sanción económica, tienen rato para festejar y lamentarse.

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