A la Feria Nacional del Empleo de la Ciudad de México acudieron adultos mayores en busca de un empleo que les genere un ingreso.
Ranferi, de 65 años de edad, con licenciatura en Economía y una maestría, acudió a ver si encontrara una oportunidad.
Antes de la pandemia, daba clases en una universidad, pero una discapacidad auditiva le impidió seguir trabajando en ese lugar.
“He pedido apoyo, me mandan por correo las oportunidades, también en un periódico donde aparecen las ofertas que hay, pero no cumplo.
“En ninguno solicitan de 65 años independientemente que tenga experiencia docente, licenciatura y maestría, simplemente no cumplo”, lamentó.
En la feria la dificultad no era la edad, sino la escolaridad. Ranferi tiene un nivel de estudios muy superior al de bachillerato que piden la mayoría de las vacantes.
Por su parte, Aurelia, de 55 años de edad, acudió porque al iniciar la pandemia la despidieron de su trabajo como personal de limpieza.
Desde entonces ha estado en busca de una oportunidad y se ha postulado a distintos empleos, pero su edad es un obstáculo.
“Me dijeron que fuera a descansar un tiempo que porque no podía estar yo trabajando por la situación. Ahorita me acaba de decir uno de ellos: ‘no, es que ahorita no estamos aceptando esa edad’, entonces yo digo ‘¿señor que voy a hacer?'”, comentó.
En México existen a la fecha 2.3 millones de personas desempleadas por la pandemia, según cifras del Inegi.
Con información de Milenio