En el norte del país hay un déficit de mano de obra, con al menos 20 mil vacantes en la industria manufacturera, que se destinarían a migrantes, y como segunda opción se les ofrecería empleo en campos agrícolas, dijo el director del Instituto Nacional de Migración (INM), Francisco Garduño.
“En el caso de la frontera, básicamente lo que estaremos buscando en primera opción es la industria maquiladora, donde estamos teniendo un déficit muy importante de mano de obra”, aseguró en entrevista al exterior de Palacio Nacional.
“En general, en la frontera norte tenemos al menos 20 mil vacantes en la industria manufacturera, y a partir de ahí es donde estaremos colocando”, explicó, al término de una reunión del presidente Andrés Manuel López Obrador con su gabinete.
Como segunda opción, en caso de que no se alcanzara la cobertura en la maquila, se contempla canalizar a los migrantes a campos agrícolas, agregó.
Precisó que el pago a los migrantes estaría a cargo de la empresa que los contrate, y lo que el INM hará es abrir un centro de integración, darles atención médica, alimentos y después vincularlos al tema laboral para que tengan un empleo formal.
En este sentido, el director del Instituto Nacional de Migración puntualizó que “es un empleo formal, no es un empleo temporal, donde ellos pueden tener mejores condiciones, en tanto se hace su audiencia en Estados Unidos, para que la autoridad norteamericana defina si les otorga o no el permiso” de ingreso.
Precisó que no hay un tiempo definido en el número de personas y el tiempo en que harán uso de los centros, pues cada migrante tiene fechas distintas para sus audiencias en Estados Unidos, además que los migrantes pueden decidir regresar a su país de origen.
