Sanciones severas contra quienes provoquen la suspensión de actividades en una empresa fuera del marco legal, es la exigencia de Coparmex a legisladores, para que estas sanciones se incluyan en las reformas a la Ley Federal del Trabajo.
“Se deben contener las acciones de extorsión por pseudo-líderes y evitar que un sindicato obtenga la constancia de representatividad sin el apoyo mayoritario de los trabajadores”, dijo Gustavo de Hoyos, presidente nacional de Coparmex.
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La inconformidad de la Confederación deriva de los paros en las maquiladoras de Matamoros, Tamaulipas, que inició a finales de enero y que fueron promovidos por los líderes que no formaban parte de los sindicatos y que azuzaron a los trabajadores.
Éstos se fueron a huelga, a pesar de que no habían sido reconocidas por la autoridad, lo que ocasionó, según los empresarios, pérdidas millonarias y despidos de los empleados que pararon labores en estas semanas.
Según datos de la STPS y la Junta Federal de Conciliación y Arbitraje, entre 2013 y 2018 se registraron tres huelgas en el ámbito federal; a nivel local, el INEGI señala que los paros disminuyeron de 68 a 17 en el mismo lapso.
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Coparmex señala que en algunos países, los conflictos laborales se han convertido en un inhibidor de la inversión. Pero en México, la paz laboral que se mantuvo a lo largo del último sexenio se tradujo en un elemento determinante para las inversiones nacionales y la atracción
de capital internacional.
Por ello, el presidente de la Confederación pidió a los legisladores que incluyan los temas y preocupaciones de todos los involucrados en el ámbito laboral, de manea que se pueda construir un marco nuevo, integral y operativo para el sector, con la participación de todos los actores.
Añadió que el sector apela a la paz laboral, en el que exista un ejercicio pleno de los derechos laborales y sindicales; esto tendrá como resultado una mayor competitividad, no sólo a nivel nacional, sino internacional.
De Hoyos refirió que las adecuaciones que se logren en la Ley Federal del Trabajo serán determinantes en proceso de ratificación del nuevo Tratado de Libre Comercio de América del Norte, el T-MEC, ya que marcará la viabilidad de relaciones de trabajo en México.
“El cumplimiento de los acuerdos internacionales y la maduración de los derechos laborales, no está reñido con la preservación de la competitividad y la paz laboral de México”, indicó en el mensaje semanal de la confederación.
