Las jovencitas de entre 15 y 16 años ven en la interrupción legal del embarazo un salida fácil de una concepción no deseada; es decir, sitúan esta riesgosa opción como un método anticonceptivo
Después de escuchar a jovencitas hablar al respecto de la Interrupción Legal del Embarazo (ILE) para salir de un posible “problema de concepción” nació en mí hacer una investigación de campo y ver qué resultados arrojaba. Confieso que la curiosidad fue lo que me llevó a escribir este artículo.
Les escuche decir que si llegaran a estar en embarazadas, sin duda acudirían a una clínica para que su “problema” fuera erradicado. Me quedé meditando en el asunto y me di a la tarea de llevar a fondo mis investigaciones.
Me senté frente a mi computadora y escribí una hipótesis de investigación: “las jovencitas de entre 15 y 16 años ven la Interrupción Legal del Embarazo como método anticonceptivo”.
Realicé una encuesta de 20 preguntas sobre el tema y las apliqué en una escuela pública, después de todo quería ver si mi teoría era cierta o falsa. La encuesta fue anónima, solo un requisito indispensable, tuvieran la edad requerida y fueran mujeres.
Me costó varios días completar mi encuesta, una vez que tuve los cuestionarios en mano contestados, analicé las respuestas. Destaco que el ejercicio de encuesta que practiqué es una muestra de la población femenina y aunque muestra relevadores resultados, no debe ser considerado la panacea sobre el tema.
Una de mis preguntas, la primera decía: ¿sabes qué es un método anticonceptivo? Mi sorpresa fue descubrir que el cien por ciento de las niñas los conocía, no solo eso, incluso en otra de mis preguntas dejaron claro que conocían el nombre de más de tres de ellos.
Seguí analizando. Debo confesar que me dio gusto que las chicas estuvieran informadas, pero mis ánimos decayeron cuando en una pregunta más específica, solo cuatro de las 20 encuestadas sabían bien que era un Dispositivo Intrauterino (DIU) y dónde se colocaba.
Siguiendo con el tema de los anticonceptivos, me sorprendió saber que 10 de 20 chicas nunca habían visto un condón femenino y por tanto no sabían cómo se colocaba o incluso se compraba. Muchas de ellas no sabían del parche anticonceptivo, del implante subdérmico pero si sabían que existía una píldora del día después y cómo debía usarse.
Me quedó claro que las chicas encuestadas no querían quedar embarazadas y que sabían que su penúltima opción era la píldora de emergencia. Contradictoriamente todas las ellas estaban seguras de que su primera experiencia en el sexo sería con protección como el condón, aunque en otra pregunta más adelante dejaron claro que se atreverían a tener sexo sin protección si es que el amor de su vida les pedía intimidad, el sexo sin protección solo es por amor asentaron ellas.
Les sigo contando. Cuando les hable de métodos anticonceptivos definitivos todas sabían que era una intervención quirúrgica al interior de la mujer, algunas sabían que se trataba de ligar las trompas de Falopio, ninguna sabía el nombre del procedimiento (salpingoclasia). Añado, ninguna vio como posibilidad como método anticonceptivo la vasectomía. Quedó fuera del radar que los hombres también pueden hacer algo más que usar un preservativo.
La última conclusión me lleva a pensar que la educación machista aún está fuerte en México y que las jovencitas no escapan a esto a pesar de que se sienten muy liberales, en pocas palabras quedo claro que el macho no se capa, se acepta y que recae en la mujer la responsabilidad de cuidarse.
Las preguntas del cuestionario que especifican si saben cómo debe usarse un preservativo todas contestaron que en teoría si saben usarlo porque desde la primaria les informan cómo hacerlo, pero dos de ella que ya han iniciado su vida sexual expresaron que en su primera vez les fue imposible colocarlo, que se rompió o se salió y tuvieron que seguir se encuentro a “pelo”, así lo afirmaron.
Todas las preguntas me dieron un panorama de lo que les acontece a las jóvenes. Como mujer me preocupó ver sus respuestas, me parece increíble que teniendo a la mano la información en la súper carretera de la información no tuvieran claro el tema de los métodos anticonceptivos, esto a pesar de que ellas confesaron pasar más de dos horas al día navegando en la red.
Incluí varias preguntas sobre enfermedades de transmisión sexual, tema importante al tener encuentros sexuales sin protección. Solo dos de veinte chicas sabían que ETS significa Enfermedades de Transmisión Sexual, cinco estaban en conocimiento del nombre de dos enfermedades y ninguna supo que era la gonorrea.
Las chicas sabían que existe un “tipo” de cáncer que se llama Papiloma Humano pero no sabían que es el hombre quien la porta y la transmite. No saben que no hay método cien por ciento seguro y dicen que la única forma de no embarazarse es el método de “no-palito”, es decir, no tener relaciones sexuales.
Entro al tema que me llevó al ejercicio. El tema de la interrupción legal de embarazo, ellas lo nombran seco y corto: “el aborto” me costó un poco de trabajo desenmarañarlo. Las chicas no desean ser mamás jóvenes, eso está claro y aseguran que si falla la píldora de emergencia podrían considerar realizarse una intervención para erradicar la situación.
Mi hipótesis se confirma aunque no en todos los casos. Diez de ellas, es decir, el cincuenta por ciento de mis encuestadas están convencidas que se realizarían un aborto para “no echar a perder” su vida, pero no están bien informadas de a dónde tendrían que acudir para solicitar uno sin tanto riesgo.
Las encuestas estuvieron divididas respecto a los prejuicios sobre el tema del aborto, destaco que la fuerza de la educación moralista en México hace mella en las adolescentes a pesar de los tiempos de modernidad. Casi el cincuenta por ciento de las encuestadas refieren que solo Dios es el que puede decidir quién vive y quien no, por ello, el aborto no podría ser opción para ellas si es que estuvieran embarazadas.
Las futuras mujeres independientes según mi encuesta ven en la ILE como una herramienta para salir de sus problemas, pero ninguna de ellas está consciente que realizarse este procedimiento podría incrementar sus “problemas”, desconocen que existe la posibilidad de morir desangradas en quirófano o quedar estériles de por vida.
Resumiendo, las chicas expresan que pueden “sacarse el chamaco” con relativa facilidad, pero no conocen los riesgos de hacerlo. No ven a la Interrupción Legal de Embarazo (ILE) como un método anticonceptivo al pie de la palabra, pero no descartan que es la única posibilidad para dejar de ser madres.
Las encuestas me dejaron claro que ninguna de ellas ve la maternidad como una posibilidad, las chicas no ven la adopción como opción para continuar con su joven vida. No puedo dejar de mencionar que solo dos de veinte chicas, es decir, el 10% de mis encuestas afirmaron sin titubeos que si llegaban a estar embarazadas si podrían ver la posibilidad de tener a los bebés. Reconocen será difícil seguir estudiando pero confían que sus padres (claro está que después de muchos regaños) las apoyaran en la crianza.
Sigo con mis conclusiones. Las jóvenes saben que tener sexo sin protección puede desencadenar en embarazo no deseado, pero no están conscientes que pueden contraer VIH, enfermedad mortal sin tratamiento.
Las jóvenes de entre 15 y 16 años están por iniciar su vida sexual en breve, algunas de ellas, según mis datos ya comenzaron pero no todas cuentan con la información clara de cómo protegerse y de las consecuencias y responsabilidades que conlleva iniciar una vida sexual. No tienen claro a ciencia cierta si el “aborto” es un método anticonceptivo pero sí están convencidas de que es una posibilidad en caso de emergencia.
Podría hacer muchas más reflexiones respecto al tema de la Interrupción Legal del Embarazo según la mirada juvenil, por desgracia mi estudio fue solo un experimento llevado a la práctica, corto y sin mucho tiempo para el análisis profundo.
Me queda como verdad que las jovencitas están inundadas de dudas, que deben ser sus padres y las instituciones las que se encarguen de darles las herramientas físicas e informativas para enfrentarse a su sexualidad con el menor riesgo. Invito a los que son padres a que hagan conciencia y hablen con sus hijas e hijos del tema, no cierren los ojos a una realidad sexual, todos en un momento iniciarán sus encuentros sexuales y más vale estar informados.
A los padres o tutores les digo: no hablar de sexo con sus hijos no hace que desaparezca la posibilidad, ignorar el hecho de que sus hijos tengan encuentros íntimos no hace que desaparezcan las enfermedades, los embarazos no deseados o la muerte por practicarse un aborto clandestino.
¿Qué es la interrupción legal del embarazo?
La Interrupción Legal del Embarazo (ILE), es el procedimiento quirúrgico que se debe realizar antes de las 12 semanas de gestación, para evitar la gestación se requieren técnicas invasivas para retirar el producto del útero. Este procedimiento conlleva mayores riesgos de salud para la madre. Su vida podría estar en peligro y pueden quedar secuelas psicológicas al practicarlo. Es importante destacar que en la CDMX este procedimiento es legal y gratuito.
¿Qué es un método anticonceptivo?
Los métodos anticonceptivos son una serie de herramientas o actos que evitan quedar embarazada, pero no solo es ese su objetivo, muchos de ellos también tienen por misión prevenir el contagio de enfermedades de transmisión sexual.
Hay métodos naturales, artificiales, hormonales, orales o inyectados, los métodos pueden ser usados tanto para hombres y mujeres.
Hay por lo menos veinte métodos anticonceptivos entre los que podemos mencionar temporales, definitivos y hasta de ocasión. Podemos mencionar: implante anticonceptivo, DIU, inyección anticonceptiva, inyección Enanthate de testosterona, anillo anticonceptivo, parche anticonceptivo, píldora anticonceptiva, condón, condón femenino, diafragma, esponja anticonceptiva, capuchón cervical, espermicida, método observación de la fertilidad, eyaculación fuera de la vagina (coitus interruptus), abstinencia, relaciones sexuales sin penetración, lactancia como método, ligadura de trompas, pastilla de emergencia y vasectomía por mencionar casi todos.
¿Qué es la salpingoclasia o ligadura de trompas?
La ligadura de trompas o salpingoclasia es un procedimiento quirúrgico que cierra o bloquea de forma permanente las trompas de Falopio, este método es irreversible y es la forma definitiva para evitar concepciones no deseadas.
Existen diversas técnicas para este procedimiento, uno de ellos es usar anillos que causan obstrucción en las trompas, esto evita que realicen corte y ligadura, otro forma del procedimiento es la cauterización de un segmento de las trompas de Falopio.
Inyección de testosterona para hombre.
No todos los métodos anticonceptivos deben recaer en la responsabilidad femenina, desde el año de 1996 la Organización Mundial de la Salud (OMS) aprobó un nuevo método anticonceptivo para uso masculino. Este consiste en una inyección de Enanthate de testosterona, esto reduce la concentración de espermatozoides en el esperma a niveles mínimos. Este método tiene una eficacia del 98.6%. Se comprobó que este método tiene efecto reversible y que los hijos engendrados después de su uso nacen en perfectas condiciones.
¿Qué es una ETS?
Las enfermedades de transmisión sexual (ETS) son infecciones que transmiten de una persona a otra a través del contacto sexual. Las causas de las ETS son bacterias, parásitos, hongos y virus. Hay una gran variedad de ETS, podemos mencionar las más conocidas: clamidia, herpes genital, gonorrea, VIH/SIDA, Virus de papiloma humano (VPH) y sífilis entre otras.
Cabe destacar que los ETS afectan a ambos géneros, pero en las mujeres los problemas se pueden agravar porque en caso de embarazo, un ETS podría causarle problemas serios al producto.
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