Los vecinos insoportables, ociosos, criticones y a los que nadie quiere se reúnen en la junta vecinal para discutir un adeudo que atañe a todos los habitantes del edificio. Pero al ser ellos los únicos que llegan a la reunión, su situación de aislamiento y soledad saldrá a la luz en esta reunión, mientras beben unos tragos de vodka.
Bajo esta premisa, la directora Bárbara Riquelme estrenó el 6 de mayo pasado la obra La Junta, que escribió Sol Pereyra y que presenta su segunda temporada en el Foro Shakespeare.
La puesta en escena, asegura la directora, es un retrato de cómo son los vecinos insoportables que están aislados, deprimidos, solos, que se esconden tras la puerta de su departamento y que el resto de los habitantes desconocen.
“Es una obra muy simbólica. Es el ser humano en esa situación, es importante para mí poner ese espejo en la sociedad para que podamos llevarnos mejor entre todos, ser más tolerantes, tener mayor conciencia entre vecinos y reír, que es lo que hace que sane el alma”, explica Bárbara en entrevista con RSSindical desde Oaxaca.
La directora reconoce que tiene vecinos insoportables y que ella misma debe ser igual de insoportable, por ello decidió recrear un poco de esa neurosis que tiene como inquilina en cada uno de los personajes que aparecen en escena.
“Todos los personajes son yo, yo tengo mucho de todos, lucho por combatir mis enojos y corajes, por ir más allá de los que la vida te ofrece y ver el todo, a veces me he encontrado en momentos donde me siente tan enojada y frustrada que me vuelvo un ser despreciable y creo que todos los personajes muestran un poquito de mí, pero todos nos podemos sentir identificados con estos personajes”, admite Riquelme.
Incluso añade que la misma Sol Pereyra, quien escribió la obra, debe ser una vecina complicada, pues al ser música y trompetista no debe ser tan gracioso para sus vecinos que se la pase ensayando sus instrumentos.
La Junta es la sexta obra de teatro que Bárbara dirige y asegura que es un reto profesional por la cantidad de actores y la historia en sí, lo que hay llenado ese interés que tenía por estar detrás del escenario pero que había pospuesto hasta que cumpliría 30 años.
Sin embargo, ahora que inició en esta faceta, la directora tiene otros proyectos en la dirección de teatro, como la obra Las despedidas, que trata la enfermedad del cáncer de mama y la depresión que padecen las mujeres por esta enfermedad
Bárbara cuenta que esta obra sigue dando funciones esporádicas de aquí a octubre, cuando tenga una temporada especial para conmemorar el mes de la lucha contra este padecimiento.
Mientras tanto, seguirá trabajando en La Junta, que se presenta todos los domingos a las 18:00 en el Foro Shakespeare hasta el próximo 24 de junio y en la que participan Claudia Acosta, Guillermo Amador y Denis González Noriega, Juan Carlos Terreros.
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